Estuvimos en varios bosques próximos al embalse vitoriano, bien de píceas, pinos, abedules, alerces, para ver si encontrábamos alguna cosa interesante incluyendo lo que nos podría deparar la madera caída, muy abundante por esta zona.
Comenzamos en un bosque de Picea abies próximo a nuestro lugar de aparcamiento. Allí pudimos ver gran cantidad de Strobilurus de diferentes los tamaños. Nacían directamente de la piña o sobre el sustrato subyacente. Es el único strobilurus que nace sobre este tipo de cono normalemente en época primaveral pero personalmente la veo viendo desde que la controlo en periodo invernal, desde el mes de Febrero…Strobilurus esculentus (Wulfen) Singer.
Tiene los cistidios de dos tipos (preparación en floxina), o bien fuso-capitados de pared gruesa o…
… con el ápice cristalífero (parecido a los inocybes) también de pared engrosada.
Vimos también una Amanita gemmata y un grupo de Telamonia en buen estado de lo que creemos que puede andar por el grupo del obtusus (no tenemos reactivos específicos). Cortinarius aff. obtusus (Fr.) Fr.
Su micro:
Sobre tocón de alerce encontró Floren un pequeño grupo de Hypholoma capnoides (Fr.) P. Kumm, especie que se suele confundir con Hypholoma fasciculare y cuyas diferencias con esta especie están en las tonalidades grises a gris violáceo de sus láminas (en vez de amarillo verdosas) y el sabor dulce de su carne. El hospedante siempre es madera de coniferas.
La particularidad de su micro como todas las de su género está en los cistidios con un contenido amorfo que suele reaccionar con las bases fuertes dando un color más o menos amarillento (crisocistidios). Es habitual verlos con esa tetilla o mucrón obtuso en el ápice.
Sobre tronco de abedul caído vimos unos preciosos ejemplares de Piptoporus betulinus (Bull.) P. Karst, a pesar de que filogenéticamente esté más cerca del género Fomitopsis, todavía no hay unanimidad de criterio entre las dos grandes bases de datos de especies micológicas para ubicarla genéricamente.
Esporas pequeñas de tendencia alantoide (curvada).
No vimos más en este ambiente lignícola, por lo que empezamos a observar la materia fecal depositada en el suelo por los animales herbívoros, es decir, la caca o excremento.
Una habitual casi siempre en este ambiente, de pequeño tamaño que pasa totalmente desapercibida, con ese reducido anillo que la caracteriza, Coprinopsis ephemeroides (DC.) G. Moreno.
Ficha de archivo: Esporas casi cuadrangulares.
Otra vieja amiga que hacía tiempo no la veíamos, nuestro coprino miserable, Parasola misera (P. Karst.) Redhead, Vilgalys & Hopple, otra pequeña especie con tonos naranja de joven, aún cerrada y adquiriendo coloraciones grisáceas o pardo grisáceas de mayor.
Bonita micro con esas esporas subglobosas a cordiformes (vista frontal) con el poro excéntrico, epicutis himeniforme, presencia de células que rodean a los basidios (pseudoparafisos) y cistidios globosos.
Un Conocybe coprófilo con el sombrero de cónico a acampanado de tonos pardo ocráceos, pie pubescente con estrías longitudinales.
Haciendo la micro observamos en el pie unos cistidios mixtos (Secc. Mixtae), con células lecitiformes (capitadas) y otras globosas, además de pelos filiformes, esporas con pared gruesa de menos de 20 micras de largura, presencia de algún pileocistido en la pileipellis himeniforme. Se trata de Conocybe pubescens (Gillet) Kühner.
No faltan los apotecios de Cheilymenia stercorea
ni los de los Ascobolus…