Jornada interesante junto con Juan y Floren primeramente en zona de quemados para terminar en un encinar cercano.  En esta zona carbonícola de pinácea que solemos ir cada cierto tiempo para controlar las especies que salen, observamos cantidad de setas pero casi todas las mismas. A pesar de todo vimos algunos «cromos» nuevos para nuestro gozo y disfrute.

Empezaremos por la más abundante, de color variable en su sombrero de amarillento a rosa pardo o a pardo rojizo , con velo marginal en los ejemplares jóvenes , láminas de blancuzcas a tonos grises-beiges, a veces con reflejos verdosos para terminar pardeando y pie escamoso hasta una zona anular. Se trata de Pholiota highlandensis (Peck) Quadr.& Lunghini.

Menos abundante pero en gran número estaba Tephrocybe atrata (Fr.) Donk.

y cuya ficha que hice hace tiempo os la pongo ahora…

Encontramos un grupito de pocos ejemplares unidos al pie que nos desorientó ya que carecía en un principio de olor harinoso; en casa y retregando bien con los dedos a  lo sumo percibí ligero olor harinoso.

Haciendo la microscopía comprobé que se trataba de Tephrocybe ambusta (Fr.) Donk (=Lyophyllum ambustum (Fr.) Singer) con sus esporas redondeadas y algo verrucosas, la ausencia de cistidios laminares y su epicutis  en cutis con pigmentación tanto intracelular como incrustante.

Tambien hallamos 3 grupos de hongos coprinoides..

Analizando el velo de hifas encadenadas pigmentadas con esferocistos ví que correspondía claramente a la Sección domestici y aunque en el segundo se puede notar restos de micelio en la base en los demás  grupos no apreciamos esta característica. Tuve que consultar el artículo de J.Vila y A. Rocabruna en la Revista Catalana de Micología V.19: pags 73-90. Barcelona 1996, para enterarme de que esta especie también puede salir en terreno quemado. Me estoy refiriendo a Coprinellus domesticus (Bolton) Vilgalys, Hopple & Jacq. Johnson.

Todos los Coprinellus eran domesticus.

Un trío de Clitocybe metachroa (Fr.) P. Kumm ya deshidratados con las láminas grisáceas, pie pardo grisáceo más acusado hacia la base y con fibrillas blanquecinas. Olor nulo.

Esporas de elípticas a subcilíndricas.

A la entrada de un pinar que no se quemó encontramos entre las acículas unos ejemplares de Galerina stylifera (G.F. Atk.) A.H. Sm. & Singer (=Galerina sideroides (Bull.) Kühner), con ese pie largo en comparación con el diámetro del sombrero con una coloración pardusca que ennegrece y que se recubre con esas fibrillas velares blanquecinas.

Microscópicamente caracterizada por el hecho de tener esporas aparentemente lisas y cistidios con terminación capitada.

Cerca de ésta un grupito numeroso de Mycena clavicularis (Fr.) Gillet, que aún conservaba cierta glutina en el pie. Su crecimiento entre acículas,las láminas ascendentes para terminar decurriendo, el borde laminar con pelicula gelatinosa no separable y el aspecto glutinoso del pie son caracteres diferenciadores aunque hay que recurrir a la microscopía para diferenciarla algunas veces de Mycena vulgaris.

Capa externa de la pileipellis con bultos más o menos simples, incluso ramificados al igual que sus cistidios. En el pie las protuberancias son generalmente  más cortas y espaciadas.

En ambiente de encinar vimos otras Mycenas que tienen la particularidad de tener estrías longitudinales en el pie más o menos visibles y esa tendencia a mancharse las láminas con la edad , me estoy refiriendo a Mycena polygramma (Bull.) Gray.

La microscopia presenta cistidios variados con la parte apical obtusa no puntiaguda, a veces con alguna excrecencia irregular. Esporas anchamente elípticas.

Pileipellis con con excrecencias ramificadas tipo coraloide a veces, con restos algo gelatinosos sobre la estructura.